Las niñas y el hada
La niñez es de las primeras etapas de la vida y es una de las más felices, de
hecho, la que más alimentará nuestra memoria de adultos. En ella, la magia,
la fantasía y la constante curiosidad, son sello indivisible. Por eso, crear con
palabras espacios que fomenten y ayuden a poblar esos reinos únicos deviene
en un regalo maravilloso por parte de los escritores y escritoras. En este cuento
de Soledad Altamirano Murillo, no solo tenemos todos los elementos de los que
hablo, si no además, la sutil invitación y el enérgico llamado a ser racionales en
el uso del planeta que habitamos. Doble función de la literatura: solazarnos en
horas de ocio y crear conciencia para mantener un mundo maravilloso y lleno
de alegría, como solo los niños lo ven.